Material de piel de salmón procedente del reciclaje de subproductos de la industria alimentaria que suelen desecharse. Se utiliza en la producción de accesorios de moda.
Pellets termoplásticos a base de proteína de leche, producto de desecho de la industria láctea no apto para el consumo humano.
Tejido compuesto por un 30 % de ramio, un 13 % de seda y un 11 % de lino.
Tela compuesta por fibras y aceites de orujo de uva; es un material reciclable que se utiliza como sustituto del cuero animal.
Tela con piel de anguila, que proviene de subproductos reciclados que normalmente se desechan.
Material hecho de mango, aditivos hechos de fuentes naturales y un soporte textil a base de poliéster.
Textil con algodón orgánico y poliéster reciclado. Es una tela resistente, cómoda, suave y ligera.
Tela biodegradable compuesta por caseína proveniente de la leche. Se caracteriza por su suavidad y propiedades antimicrobianas; es un material higiénico, transpirable y aislante térmico.
Es un tejido compuesto por un 65 % de lana virgen peinada y un 23 % de lana reciclada.
Lana peinada de gran calidad, seleccionada cuidadosamente para crear una nueva prenda de vestir.
Material compuesto por fibras mixtas procedentes del reciclado de tejidos y fibras de poliéster reforzadas, unidas entre sí mediante un proceso térmico de cohesión.
Fibra de celulosa reciclada, obtenida a partir de una amplia gama de materiales, como los residuos textiles ricos en algodón, el papel reciclado o los residuos de cultivos como la paja de arroz o de trigo.