El aragonito o aragonita es una de las formas cristalinas del carbonato de calcio (CaCO3). Puede encontrarse en forma de estalactitas, y también en la concha de casi todos los moluscos y en el esqueleto de los corales. Entre las variedades del aragonito destaca la llamada flos-ferri (flor de hierro), que se asemeja a un coral.
Químicamente es un disulfuro de hierro y cobre metalizado, de la clase 2 de los minerales. Los cristales son pseudotetraedros, corrientemente con recubrimiento de tetraedrita o tennantita. La mayoría de las veces se la encuentra en forma masiva y las pocas veces que se ven los cristales están muy maclados y aplanados. Forma una serie de minerales de solución sólida. Puede formarse y encontrarse en: rocas pegmatitas neumatolíticas, rocas hidrotermales de alta temperatura.
La dumortierita es un mineral nesosilicato fibroso de coloración variable de aluminio boro-silicato. Se cristaliza en el sistema ortorrómbico en general formando agregados fibrosos de cristales prismáticos alargados. Los cristales son vidriosos y su color varia del marrón, azul, y verde a los más raros violeta y rosado. La substitución del hierro y otros elementos tri-valentes por aluminio es lo que produce las variaciones de color.
La Marmatita es una variedad de la esfalerita, está compuesta por sulfuro de Zinc. Por su aspecto se confunde con la galena. Es la principal mena de zinc. En masas fibrosas o compactas son frecuentes las maclas. Su contenido en hierro es alto.
La piedra pómez es una roca volcánica vesicular que suele ser lo suficientemente ligera como para flotar en el agua. Normalmente tiene una composición química similar a la riolita (o su contrapartida plutónica, el granito), aunque el magma de virtualmente cualquier composición puede formar a la piedra pómez. El término vesicular se refiere a la presencia de vesículas, o cavidades de forma irregular, las cuales producen una textura esponjosa o burbujeante y de muy baja densidad en rocas volcánicas.
Las serpentinas constituyen un grupo de minerales que se caracterizan por no presentarse en forma de cristales, excepto en el caso de pseudomorfismo. Son productos de alteración de ciertos silicatos magnésicos, especialmente olivino, piroxenos y anfíboles. Existen tres formas polimorfas que cristalizan en el sistema monoclínico: la lizardita, la antigorita y el crisotilo. Las dos últimas poseen, además, polimorfos ortorrómbicos.
Es una variedad de tela plastificada, sustituto de piel y microfibra para corte y forro, en la fabricación de productos de la industria textil.