La calcedonia es una variedad criptocristalina del cuarzo, pertenece al grupo de los óxidos, con fórmula SiO2. Pertenece al sistema de cristalización trigonal. La calcedonia es de procedencia volcánica y debe su color por las múltiples inclusiones que se han depositado durante el crecimiento de ésta. La calcedonia posee múltiples variedades y colores, siendo las más típicas toda clase de ágatas y jaspes.
El aragonito o aragonita es una de las formas cristalinas del carbonato de calcio (CaCO3). Puede encontrarse en forma de estalactitas, y también en la concha de casi todos los moluscos y en el esqueleto de los corales. Entre las variedades del aragonito destaca la llamada flos-ferri (flor de hierro), que se asemeja a un coral.
El ágata no es un mineral específico, sino un conjunto de variedades microcristalinas del cuarzo. Se encuentra en rocas volcánicas cuyo tamaño puede variar desde milímetros a varios metros. Se caracteriza por presentar una serie de bandas concéntricas de colores similares, opacos y translúcidos, que recuerdan el corte de un tronco de árbol en sentido circular. Puede adoptar diversas formas y presentarse en muchas variedades. Es una roca dura y resistente a los reactivos químicos.